Mas

En los últimos tiempos todo va muy deprisa cuando mejor iban las cosas todo se fue al garete.

La crisis o la mala suerte que a veces ha aparecido en mi vida sin avisar y sin anestesia.

Lo cambio todo, económicamente todo funcionaba, la compra de la nueva cueva, los muebles y el coche.

Todo iba sobre ruedas y un cambio en el país, me cambio mi propia vida.

A traición, con casi nocturnidad y alevosía.

Sin derecho a replica, también.

Hechos consumados contra los cuales no he podido enfrentarme por mas que lo he intentado.

Ganando o perdiendo hay que luchar por uno mismo.

Y eso intento.

Pero para luchar también hay que tener oportunidades y estas son escasas.

Divago y ese es mi gran riesgo.

A nadie o a casi nadie, le puede importar cual es mi suerte.

Basta ya de divagar con la mala suerte uno se la encuentra y o la asume o se rinde.

Y no esta en mi diccionario el rendirse fácilmente.

Caer en estos pensamientos, no es bueno, para luchar contra algunas cosas, hay que tener posibilidad de enfrentamiento

Cuando no es así, hay que moverse, no encerrarse, buscar algo que tenga tu cerebro ocupado.

Acabo de decidirlo, mochila y cámara y un cambio de ambiente puede que me venga bien.

A este viaje no me pueden acompañar, ha surgido de repente y así nadie puede organizarse cuando se tienen obligaciones importantes.

Avisare eso si, y me preguntaran como siempre...

¿Otro viaje?

¿Vas solo?

Espero que se me comprenda, pero a veces el lobo siente sus propias cadenas y necesita respirar fuera de las cuatro paredes de su propia cueva.

Antes de haber llegado las vacas flacas, compre un coche nuevo, dejando el anterior a mi ex.

Le tengo que hacer kilómetros... Disfruto en carretera, tiene el motor suficiente para hacer viajes largos.

Sigo disfrutando de viajar como antes, hay música y hay carreteras por descubrir.

No tengo decidida la dirección a la que me voy a dirigir.

En momentos así no es lo que me importa mas.

Dicho y hecho... buscar los cargadores de las baterías y del móvil y el ipad por si me apetece escribir.

La mochila siempre esta preparada, tan solo unos vaqueros y dos o tres camisetas.

Un par de pendrive con música de la mía.

Las emisoras de radio en carretera, no suelen ser un buen recurso.

Es otra de las ventajas del coche,  admite los formatos nuevos que permiten llevar en  poco sitio mucha música.

En carretera me gusta llevar mi música y quien me conoce sabe que me gusta casi toda.

Pero cuando voy solo y pretendo disfrutar de hacer kilómetros, suelo llevarme una buena dosis de rock lo mas duro que tengo en el disco duro.

Como no se cuanto tiempo estaré por ahí fuera, llevare dos selecciones distintas para no aburrirme de los AC-DC cosa que seria un verdadero pecado.

Una ultima comprobación por toda la casa, si están los ordenadores apagados y las cosas mas o menos en su sitio...

La bolsa de las cámaras y una bolsa con la ropa.

En el coche hay unas botas de montaña por si acaso me meto en algún paraje de esos complicados.

No necesito mas.