Hay un vacío en la noche…
La oscuridad te aprisiona contra los rincones ocultos.
Donde no queda más remedio que, encontrarse uno mismo mirando al vacio y con la mirada en la parte más oscura de tu propio interior.
Esa noche sin la sombra de la luz mortecina de cualquier bombilla.
Donde la música que suena, lucha por llegar nítida.
Todos los sentidos son absorbidos por la oscuridad y el pertinaz pensamiento de porque… todo es.
Hace un rato… escribía que digo y expreso demasiado
Y cierto es… yo mismo me encuentro en un torbellino de ideas que parecen alejarse y regresan obstinadamente al lugar de origen.
Ni con la luz de la mañana, esa que va a mi paso todos los días cuando me encamino a la rutina de las peleas vanas y estúpidas
Donde tener poder, significa valer menos, pero no importa si puedes decidir por otros.
Y mientas…
Oyendo a R. Arjona descubro que dice una gran verdad.
Descubrí que la vida
es un juego de azar donde pierde el que gana.
Por equipaje una mochila,
una guitarra y unos versos de Borges.
La guitarra la cambie por una cámara, y los versos por un portátil
Pero jugar arriesgarse es perder siempre
Nadie juega tu juego… porque los deseos siendo vida no salen por estar encadenados.
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