Segunda parte de un sueño.

No se yo, si los mas críticos del Lugar aceptaran de buen grado la segunda parte del Sueño

Pero los compromisos son para cumplirlos.

Y al fin y al cabo de un sueño se trata.

Después de ver las reacciones sobre los dos primeros veré si poner o no la parte final del sueño.

Segunda :

¿Quieres tomar algo?

Todo respondo, te ríes…
No, tonto, digo ¿que si quieres beber algo?

A ti toda entera. (Contesto otra vez)

Pero, si quieres ganar tiempo antes, un café con algo de ron, mientras fumo un cigarro.

Mientras en el portátil busco música que suene en la cueva.

Es una de las cosas que más me gusta, conseguí que en toda la cueva suene la música

Cambiaste la ropa del baile... por algo blanco corto y suelto.

Yo fui por café... y ron y te pregunte si querías algo tu.

Y sentándome… donde ya estaba antes… deje caer la cabeza en el respaldo.

Cerrando los ojos, para retener en mi memoria todas las sensaciones vividas.

Y esperando más, mucho más.

Sin abrir los ojos noto como te colocas sobre mis piernas extendidas.

Noto tu respiración sobre mi cara, sigo sin moverme como si tuviera miedo a despertar de un sueño.

Tus labios a penas los siento, estás jugando, pero con fuego.

Te recuestas sobre mi pecho, y sigue tu juego, con tu boca recorres mi cuello para besarme más intensamente.

No te voy a dar facilidades, es tu momento y es tu voluntad la que tiene que llevarnos lejos.

Solo mis dedos descubren mi urgencia, pero están a acostumbrados a ser retenidos.

Aun así buscan tu cintura solo un roce.

Tus manos cogen las mías, las diriges, suben por tu costado sin prisa.

No hay prisa, si urgencia, necesidad, pero no vamos a perder el momento.

Ahí se sueltan en tu cuello, suben un poco más y se pierden por tu pelo, suavemente, despacio.

Enredados entre el pelo y tu nuca te acarician.

Te pegas más a mí.

Por fin abro los ojos con mi boca dibujo tus labios, suavemente, beso tus ojos y regreso una y otra vez sobre tu boca.

Me rio bajito… y me miras con esa cara que conozco tanto.

Si, esa de ¿haber por donde sales ahora?

Y te digo al oído… hoy dormirás con los labios doloridos no me voy a cansar de besarte.

Ahora eres tú la que con urgencia me besas como queriendo quitarme el alma.

Ya no hay respiro mis dedos bajan y se cuelan entre tu ropa, buscándote tocándote.

Suben y bajan por tu espalda, buscan tus pechos y los rozan.

Muerdo tu cuello, busco tu excitación y notarla en mis manos.

Que tus pechos se endurezcan entre mis dedos.

Que tus pezones redondos sean llevados por ti a mi boca.

Tu ropa me estorba, no quiero nada entre tu piel y mi piel, y la subo sin que puedas hacer nada.

Me miras, no dices, o lo dices todo.

Tus manos capturan mis manos y ellas me acercan a tus muslos, a buscar tu fuente.

Y allí se pierden, en tus rincones, tu humedad llenan mis dedos.

Y los llevo a mi boca, necesito tu sabor, y por fin lo tengo.

Mis dedos ávidos de encontrar, rozan, tocan, entran.

El calor aumenta, el deseo ya no tiene control posible.

Ahora eres tu… la que me desnuda yo facilito que la ropa desaparezca.

Y te dejo el mando de nuevo, no quiero hacer nada que tú no desees.

Y quiero tus deseos más que nada en este mundo, de eso se trata.