No quiero preocupaciones… para nadie

Se quien soy, se lo que deseo, y conozco a la perfección lo que puedo o no puedo tener.
Sueño y lo elegí libremente, sabiendo también.
Quizás sea este maldito blog, que sus letras hagan ver lo que no se debe ver,
Tratar a los lobos es difícil… por si nadie se había dado cuenta lo aviso
¿Que el lobo necesita? Si, claro, mucho.
Así es y no voy a negarlo… seria mentir y no uso la mentira ni aunque se favor mía, tampoco.
Pero eso no es noticia, ya se sabia
En la cueva se habla de todo y se dice también todo.
Bueno el lo hace, no quiere que haya sorpresas y procura dar lo mas posible en ese sentido.
¿Que quiero mas?
Si, claro todo… sigo sin mentir
Luche toda mi vida acambio de nada, y un día descubrí que nada tengo.
Al mismo tiempo en mi cueva apareció un sueño
¿Es malo quererlo todo?
Lo siento, mentiría si no lo dijera.
Lo llame Quimera, y sueño con el, dormido y despierto, y no me daña hacerlo, me crea ansiedad a veces, soy de carne y hueso.
Y aunque nadie crea, el lobo sabe que quiere y porque, y sobre todo hasta donde puede llegar.
Dije siempre que era mi sueño y mi locura, pero si eso hace daño a alguien, abandonare, todo por no causar mal.
Esto no es el aullido del lobo, ni tampoco el llanto por no alcanzar un sueño.
He aprendido a lo largo de mi vida, que llegar tarde, es no alcanzar lo que se desea
Y yo he llegado demasiadas veces tarde.
Pero tengo una obligación conmigo, y sobre todo con mis sueños, mientras se me permita soñar
Seguiré haciéndolo… a veces sosegadamente y otras se me escapara de las manos.
Pero eso ocurrirá en la cueva, sin nadie que pueda verlo ni presenciarlo.
Así tiene que ser… porque así son las cosas
Ahora colgare esto en el blog.
Y despacio bajare a la playa a notar la arena en mi espalda, no se si soñare o solo cerrare los ojos oyendo batir las olas.
No tendré confidente alguno esta noche, porque hasta la Luna esta noche, llegara tarde.
Se también que los sueños pueden elegir quien los sueñe, y tendré que aceptar que el mío un día descubra que no es bueno que el lobo sueñe