Ultimas compras...

Hoy fui de centro comercial…

Compras de última hora, siempre pasa igual, que tengo que salir corriendo, aunque por las noticias que me llegan, conmigo ni han empezado.

Pero ya cuento con ello… No me sorprende nada, luego vendrán… no sabíamos que comprarte o el célebre es que eres un caprichoso.

Lo he pensado tarde, pero lo que debía haber hecho era comprarme mis caprichos y ponerlos bien envueltos… al lado de los de los demás.

Más que nada para ver la reacción, pero ya es tarde… y se acabo el tiempo.

O estoy por decir que me trajeron los camellos... una caja que compre para las cámaras… al menos habrá un paquete grande para el Lobo.

Pero dejemos a los reyes, que yo con los monárquicos, nunca me lleve.

Aparte de que sería una pataleta… y tengo la rodilla chunga.

Fui a comprar la caja a uno de esos sitios especializados en todo tipo de herramientas y artículos para los manitas.

Hay una sección solo para decoración, y allí encamine mis pasos.

Llevo meses con una idea metida en mi cabeza, y es hacer ampliaciones de alguna de mis fotos y enmarcarlas, pero no en un marco tradicional, ni a un solo tamaño.

Quiero un rincón solo en la cueva (creo que lo he dicho aquí ya varias veces) lo tengo tan claro en mi cabeza que es como si lo estuviera viendo.

Quiero retratos grandes en Blanco y negro, fotos más pequeñas de personajes.

Desnudos (si, desnudos, lo mas artísticos que yo sea capaz de fotografiar) y cuando tenga modelos, que eso también es importante.

Dos estanterías nada grandes, para poner la pequeña colección de cámaras antiguas y libros de fotografía que ahora están aburriéndose en cualquier lugar de la cueva.

Luces indirectas y dos paraguas reflectantes de esos que se usan en los estudios de fotografía.

Siempre se podrá usar como medio estudio… para hacer prácticas o sesiones personales.

He soñado muchas veces con ellas.

Todo eso iba pensando entre fotos de… Central Park, el Golden Gate, la Torre Eiffel y fotos más o menos vistas por todos.

Aquí y ahora veo y sueño con ese rincón y llenarle de contenido y de uso.

Cerca de los ordenadores y las pantallas…

Busque una foto en la red que me sirviera como referencia para que os hagáis una idea pero no hay forma.

Los sueños y las ideas que uno lleva en la cabeza no es fácil de reproducir con fotos de San Google.

Ósea que tendréis que esperar.

Al final conseguí arrancar de ver los dichos marcos con fotos que no me decían nada, y pase por otras secciones.

Cuartos de baño, cocinas, herramientas y ahí hice un alto en el camino, buscaba una caja y encontré algo aproximado.

Y mañana intentare forrarla por dentro para proteger objetivos y cámara por si algún golpe que otro, pero así tendré todo organizado dentro de lo que yo soy capaz.

Caben objetivos, cámaras, cables y  lápices de memoria, con lo que ganare espacio para la cueva.

Hasta la fecha tanta mochila suelta es como un patio de guardería lleno de juguetes

En este caso los juguetes y los caprichos del lobo.

Una cosa más, hecha poco a poco ir preparando cosas para la salida de esta cueva.

Al fin y al cabo cada día que pasa, las circunstancias me dicen y me cuentan que cuando lo haga.

Será un espacio, libre con pocas cosas que sacar de aquí.

Y estará vacio largo tiempo… soñar y esperar es una cosa

Pero las realidades, nos centran día a día, noche a noche, o Madrugada tras Madrugada.

No sirven los deseos, para cambiar las evidencias, los sueños, sueños son, ya lo decía el Calderón ese.

Habrá, espero, nueva cueva este año que empieza, en eso no hay vuelta atrás.

Pero será una cueva de un viejo Lobo, sin más.

Llena de mis trastos, libros y música.                    

Intentare eso sí, mantenerla oculta será mi descanso el que tendré que buscar allí.

Con pequeños rincones como el que describí antes, eso será así.

El resto… una cueva de lobos.

Y a los lobos, ya lo saben todos los que han leído cuentos, mejor dejarlos lejos porque para eso son los malos.