domingo, enero 09, 2011

Dos días…


Dos días escondiéndome detrás de la búsqueda de las letras de otros.
Intentando leer, buscar meterme entre los personajes de…
¿Cuántas?
¿5, 6 novelas?
Una infumable que me empeño terminar de leer, quizás buscando soluciones a algo que no tengo en mi mano.
Novelas de espías, novelas sobre e-mails de personajes perdidos, novelas sobre bisabuelas heroicas, héroes de la guerra con Napoleón y música.
Colocar todo lo que tengo por orden, desde las discografías enteras de Bandas de Rock.
Canciones sueltas etc.…
Hay todo un esfuerzo, sobre todo de concentración en seguir escondiéndome detrás de un trabajo o una lectura que hoy y mañana nada me importa.
Luego una noche más sin dormir… una salida frustrada.
Me dio plantón mi hija, y luego la lluvia pertinaz cayendo gota a gota.
Buscando entre un mar de gente, en crisis, que vacían sus carteras en las jodidas rebajas de Enero.
Pretexto buscar un ebook para el caprichoso.
Ósea yo…
Pero ni vi lo que buscaba y además puestos a ser caprichosos, me compraría el Ipad, o sea la tableta de MAC.
Al final que más da… la tuve en mis manos un rato, y sorprendiendo a propios y extraños de cómo me movía con ella.
Hasta me llegaron a decir cómpratela… no pierdas el tiempo
Casi me desmayo palabra.
Luego el móvil apagado, sin batería y sin posibilidad…
¿Escondiéndome?
No, haciendo el estúpido… eso es lo más cercano a la realidad.
No me valen las referencias ajenas, se que el lunes me meto en un agujero negro de problemas.
Tengo la seguridad absoluta de ello, es largo de explicar, pero es un agujero negro que en el fondo no me preocupa.
Me creara tensión, tendré que centrarme y trabajar horas y horas sin ganas.
¿Pero a caso no llevo haciendo eso más de la mitad de mi vida?
Hice fotos, sin gustarme ninguna, veía cuerpos sin rostros, quise fotografiar prostitutas haciendo la calle.
Una provocación en una zona poco recomendable.
Pero como si las nubes me quisieran echar de la zona, se puso a llover, cayéndose el cielo sobre mí.
En un abrir y cerrar de ojos, ni prostitutas, ni clientes.
Camine bajo la lluvia un buen tramo, hasta donde había dejado mi coche.
Y al llegar a pagar el parking solo entonces me di cuenta, que estaba empapado, la mochila protegió la cámara todo lo que pudo.
Pero mi pelo, mi cara y mi ropa… recogieron toda el agua que eran capaz de absorber.
¿Qué paso con mi huida?
Nada, soy incapaz de huir de mi mismo, condenado en vida a arrastrar mis sensaciones, mis necesidades y mis sueños.
Lo malo no es eso, es que arrastro a mis sueños conmigo.
Y no es justo… ni pretendo llevar conmigo a mis infiernos personales a nadie.
Conduje mi coche hasta aquí, y me senté delante de esta pantalla en blanco.
Durante horas tuve el Word abierto sin ser capaz de escribir una sola palabra.
Luego alguien me pregunto… ¿Qué tal tu día Lobo?
Y para ahorrarme dar explicaciones tediosas, lo escribo.
Nada digno de mención una salida más un día de lluvia.
Donde había más claridad en la calle en medio de una tormenta, que en el interior del Lobo.
Y ahora poco antes de dejaros algo para leer…
Tengo tanta necesidad, que mientras leéis, buscare café ron… y fumare la habitación esta noche no tiene humo suficiente.

4 comentarios:

Lu dijo...

ohhhhhhhhhhhhhhh, humo o paracera que tienes mas niebla que en londres en la cueva. Anda si te gusta el ebook porque no te das ese capricho. Es muy caro y no tengo mucho porque sino yo misma te lo regalaba. Ese sera el proposito de este año ahorrar para un ebook para la cueva nueva ea. Para cuando lees te acuerdes siempre de este bicho joio.
Besitos y abracitos

;p dijo...

tu le has preguntao si le importa acompañarte....a tus infiernos????
das libertad, deja que la usemos.
y no es justo pa quien???
besitos lobo

morrua dijo...

Vive y deja vivir... ese es tu lema, pués no lo creo, tu dejas vivir pero no vives como quisieras, cada cual es como es, ahora lo que no entiendo es porque te extrañas en esta vida de tantas cosas.
Según tu dices dejastes pasar muchos trenes... no pasa nada, siempre hay un antes y un despues.
Cada uno es como es, te dierón plantón... te mojastes, no te salierón las fotos que tu querias, ¿y?, que no somos dueños de nosotros mismos, y normalmente eso nos pasa porque pensamos más en los demás, pero es innato, ¿puedes cambiar? para eso y para nada.
Aceptate como eres, tu eres así, no te hagas mala sangre, te pasara hoy mañana y dentro de 20 años.
Lobo viejo nunca cambia, y no tienes porque hacerlo.
Un beso.

Aleatoria. dijo...

¿Huir de uno mismo?. Sabes o deberías saber que es imposible.