martes, enero 24, 2006

Elucubraciones

Dudo a veces, escribir sobre mis impresiones diarias, bien dejar correr los dedos y sacar retazos de sueños, sentimientos.
Cualquiera sabe que soy capaz de dejar salir.
Quizás porque el día la mayoría de las veces no esta cargado de cosas dignas de comentar o son demasiado pueriles.

Comentarios sobre el vivir en sociedad, lo que repercuten las acciones propias, en los demás, o viceversa.
Plantear en voz alta las dudas, los enfados, las risas o las medias sonrisas.
El enfado por sentirme falto de libertad en la sociedad en la que vivo.
O la alegría por haber podido contemplar un atardecer tranquilo.
El día a día, a veces es más complejo de lo que creemos, cargado de pequeños detalles, cosas que al acabar el día, en mitad de la noche se percibe de otra forma, mas intima mas intensa.
No se que haré mañana, quizás pueda contar que oí una canción que me recuerda tiempos pasados.
Que me encontré con alguien con quien compartir, y lo que es más difícil aun...
Compartí ese momento.
Porque me siento a veces perseguido, o porque persigo a veces, sin alcanzar, ni de lejos la estela de lo que pretendo.
Porque un saludo, consigue de repente sentirme bien, o un simple gesto me hace saltar como si fueran a agredirme.
No se que haré mañana, buscare la forma de continuar, la manera de apropiarme de aquello que me hace creerme algo mejor.
Buscar la excusa, para regalar algo de lo que me gustaría compartir.
Hace mucho en mis paseos en la noche, tenia el recurso de hablar a mi antiguo amigo el Búho, la Luna escuchar mis conversaciones en voz alta.
Hoy me senté delante del teclado, y deje correr mis dedos.

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